Roma.- Después de reunirse hoy durante una hora con el Papa en su residencia de Santa Marta, en el Vaticano , el obispo castrense argentino, Santiago Olivera, anunció que recuperó el libro de bautismos de la capilla Stella Maris de la ESMA -la ex Escuela Mecánica de la Armada, uno de los mayores centros dedetención clandestinos durante la dictadura -, un documento cuya existencia no se conocía, que será hecho público en breve.
"En este libro figuran los 127 bautismos realizados en la ESMA entre los años 1975 y 1979. Tenemos que investigar, puede ser que algún marino haya bautizado allí a su hijo, pero puede ser que otros no", reveló Olivera, aludiendo a la terrible historia de dados a la luz en la ESMA por mujeres detenidas, luego desaparecidas.
Olivera, que fue designado por Francisco obispo castrense en marzo del año pasado, anunció su intención de dar a conocer y "poner a disposición" este documento inédito en las próximas semanas, después de tratarlo con el resto del episcopado y con la Comisión ejecutiva de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), que la primera semana de febrero será recibida por el Papa.
"No sé si habrá mucha información en el libro de bautismos de la ESMA , pero por lo pronto es un dato que se pueda conocer a los niños que fueron bautizados allí entre el 1975 y 1979, para alguien que necesite saberlo", dijo Olivera, que contó que lo puso al tanto de esta novedad a Francisco, que le dio su aval.
"Al Papa le pareció muy bien, le pregunté por los modos, si dárselo a uno, o no y él me dijo de socializarlo a la prensa y de ofrecerlo y cuando vuelva (a la Argentina) lo hablaré con Ojea, con la comisión ejecutiva y buscaré el modo de presentarlo en la línea de disponibilidad, apertura y transparencia que él ha impulsado", dijo Olivera, que hizo el anuncio antes de la presentación de un libro que escribió sobre el Cura Brochero, que fue traducido al italiano, en la sede de la Radio Vaticana.
Espacio Patrik Rice, donde funcionaba una capilla en la ESMA que utilizaron para bautizar niños apropiados. Foto: LA NACION / Santiago Filipuzzi
Ante una pregunta de LA NACION, Olivera contó que descubrió la existencia del libro de bautismos de la ESMA después de que una periodista le hizo una pegunta al respecto, que no supo responder. "Entonces lo busqué, lo rastreé, lo encontré y me lo entregaron. Lo tengo guardado yo", afirmó.
Olivera, que fue hasta marzo pasado obispo de Cruz del Eje y promotor de la causa de canonización del "cura gaucho", contó que durante la hora que estuvo con el Papa también hablaron de su nueva labor como obispo castrense. "Como el Papa estuvo un año y medio a cargo del obispado castrense, entre la muerte de (Norberto) Martina y antes de (Antonio) Baseotto, él sabe y te pregunta. Le hablé de mi trabajo, de lo que estoy haciendo, del tema de los sacerdotes, del tema de la historia pasada, de cómo mirarla, con verdad, y un poco lo que estoy haciendo. Yo no tengo nada que ver con el mundo militar y por eso quería un pastor que esté ahí", contó.
También hablaron del inminente viaje del Papa a Chile y Perú , del submarino ARA San Juan y de "la tristeza de que no aparezca" y del pedido que le hizo la ministra Patrica Bullrich para que todas las fuerzas de seguridad pasen a estar bajo de la órbita del obispado castrense. "Hoy tenemos dos, prefectura y gendarmería. Y la idea es que ahora se sumen la Policía de Seguridad Aeroportuaria y la Policía Federal. Históricamente el arzobispo de Buenos Aires se ocupaba de la Policía Federal y el Santo Padre me dijo que él no lo veía mal y que le parecía bien que sigamos haciendo ese camino", contó.
"Con tanta cosa me olvidé de decirle que yo aspiro, el día de mañana, a hacer un sínodo castrense, con toda la Iglesia castrense, con algún militar, con familias, para pensar en el obispado castrense, el hoy, el futuro y el ayer. Pero se lo voy a escribir", agregó.
Consultado sobre el fuerte comunicado emitido hoy por la comisión ejecutiva, que recordó que nadie puede hablar en nombre del Papa, salvo sus voceros formalmente designados, Olivera elogió el pronunciamiento, que definió "una maravilla. "Me parece muy bien saber que el Papa tiene sus propios canales de información y sus voceros, y que algunos se arrogan, pero la clave es escuchar al Papa. Invito, entre comillas, a que alguno que critique al Papa, me diga si el Papa no vive el Evangelio, no anuncia el Evangelio", dijo.
Ante una pregunta sobre si no debería haber llegado antes el comunicado, algo que quizás habría evitado el clima anti-papal que se respira en ciertos sectores de la Argentina, Olivera contestó: "Si el clima es antipapal es porque mucha gente espera que el Papa vaya y como digo siempre, el Papa sabe mucho más que nosotros y sabe si están dadas las condiciones, o no, para eso. Y yo de verdad, confío plenamente en la cintura que el Papa tiene y en la capacidad y no sólo del Papa, sino del Vaticano y de la diplomacia vaticana-. Pero en realidad el Papa es muy querido, en el interior es muy querido, es muy aceptado. Cuando se lo quiere teñir de uno o de otro lado de una mirada política, ahí estamos en problemas".
"El Papa nos trasciende. Y como yo he dicho hace poco, el Papa es un lujo para el mundo, es un líder, es un referente y los argentinos tenemos que salir de nuestra mirada, de nuestro propio ombligo y pensar que tenemos a un argentino que nos está dejando de maravillas en el mundo. Mirémoslo a él y sigamos sus pasos", concluyó.
Nota extraída de: http://www.lanacion.com.ar/2099450-con-aval-de-francisco-haran-publico-el-libro-de-bautismos-en-la-esma-entre-1975-y-1979